Hoy miércoles 13 de febrero asistimos, en el Museo Reina Sofía, a la exposición dedicada a María Blanchard (Santander, 1881–París, 1932) en la que se reivindica la trayectoria artística y personal de esta pintora española bastante olvidada a pesar de ser una de las grandes figuras de la vanguardia europea de comienzos del siglo XX, formando parte de una generación de artistas que apostó por la renovación artística y su consolidación.
La exposición recorre las tres etapas vitales en que se puede dividir su creación: una primera etapa de formación (1908-1913), que incluye su obra más temprana, caracterizada por las influencias de sus maestros. Un segundo período (1913-1920) muy activo dentro del movimiento cubista. Un cubismo muy personal que se distingue por la austeridad y el dominio del color. Y por último, la 'Etapa de Retorno al Orden (1919-1932)', en la que se aleja del cubismo volviendo a la figuración y en la que alcanza su plenitud artística
Además de una amplia y estupenda selección de su pintura, también podemos ver imágenes de la artista, fotos, dibujos y alguna caricatura.
Iniciativas como esta exposición ayudan a que la figura de María Blanchard tenga un reconocimiento y un lugar que por derecho propio le corresponde, y que la historia le ha negado. Hoy, 80 años después de su muerte, sigue siendo la gran desconocida