Nuestro primer encuentro con todas las socias no podía ser más goloso y calórico, y no solo por la sensación agradable y dulce al paladar, sino por la afable y grata relación amistosa que se palpaba en el ambiente.
Entre risas y mucha conversación pasamos unas horas inolvidables.
Ocasiones como esta no van a faltar, os esperamos ver en la próxima.